domingo, 8 de noviembre de 2015

LOS  DATOS  QUE  A  MUCHOS  INTERESAN


Nelson Romero Díaz

La última vez que me tomé un rato para redactar una composición fue el 17 de septiembre de este mismo año titulada “PENSANDOLO BIEN”. La publiqué en mi blog spot: www.nromerodíaz.blogspot.com. Procuraré no ser tan adicto al tema de la herramienta estadística, aún cuando lo considere inevitable.

¿De qué se trata? En primera instancia, el deseo de publicar algunos pronósticos antes de que la realidad nos atropelle y quienes lo lean a posteriori, lleguen a pensar que he manipulado los datos para que mi predicción goce de credibilidad. Nada más alejado de mi manera de pensar y actuar.

¿Qué se tiene? En otras ocasiones, abordando el mismo tema, he revelado el seguimiento que le hago al portal DÓLAR TODAY y la información que se ofrece con relación al potencial paritario entre la moneda de uso local, el bolívar, y la moneda del mercado internacional, el dólar. Como se sabe, esa paridad es indirecta pero de fácil obtención.
Ahora, distinguidos lectores les cuento lo que me traigo del archivo de mi computadora, la “viejita. En primer lugar, hoy domingo 8 de noviembre de 2015 es el tricentésimo décimo segundo (312) día del año, por lo que restan 53. Segundo, hasta ayer sábado se han consumado 45 semanas del año y de ellas solo 43 hay registro de cotización del mercado del dólar libre, paralelo o como se le quiera llamar; igual situación se presenta para los martes y miércoles.

¿Cuál es el dato que tanto interesa? Cuando escribo es domingo, el lunes 9 es mañana y aun cuando se sabe que en la generalidad de los casos, la cotización de ese día es el mismo que la del domingo y sábado inmediatamente anterior, también es cierto que el análisis estadístico brinda una referencia. Así, para mañana lunes, la ecuación que mejor ajustó los datos de la serie de 43 cotizaciones de ese inicio laboral de la semana, establece que su probable precio debería ser: 850,93 bolívares por unidad monetaria estadounidense, mientras que el fin de semana el precio fue 826,87 bolívares por dólar: una potencial diferencia de 2,90 por ciento.
Para el martes se predice o pronostica una paridad igual a 851,45 bolívares por dólar.
Amanecerán lunes y martes y veremos que tal son los pronósticos en estos tiempos

viernes, 18 de septiembre de 2015

¡PENSÁNDOLO  BIEN!
Nelson Romero Díaz

¡Pensándolo Bien! es una expresión de uso frecuente utilizada como recurso para salir del conflicto momentáneo creado por el sí y por el no. También es un paso al frente dado por un hombre cuando afronta, decidida y definitivamente, un asunto vital para él.

Escribir es, pensándolo bien, resumir en pocas palabras las 24 horas de un día cualesquiera de la vida de una persona; las siete fechas semanales de un taller mecánico, el mes de un banco de ahorro y préstamo o el año de la administración de un país.

Se diría, por ejemplo, que las 24 horas de vida de una persona tiene una condicionalidad de género ¿sí o no? ¡Claro! Depende si, se es hombre o se es mujer. Si es de él, es más fácil. Los hombres somos más lineales que ellas: nos despertamos; unos agradecen el nuevo amanecer, otros, ni pendientes; después, las higienes bucales y las descargas renales; el café negro o el te; la prensa del día; el baño; la vestimenta, el encendido del carro y el “primer lazo esclavizador”: el móvil y..... ¡Run!.....rumbo al trabajo. En cambio, ella; ¡Ay, ella! Hasta que no esta lista, arreglada y bien maquillada no va a la calle a luchar con denodado esfuerzo.

Describir detalladamente las jornadas diarias laborables de un taller mecánico es, por demás, complicado. Comienza el lunes con el común de los eventos: la ausencia laboral parcial, pero ausencia al fin; los retardos laborales, casi siempre por “culpa del transporte colectivo” y de la bruma mental debido a los “espirituosos humores” del domingo. Otro día son los insolentes reclamos del propietario cuyo vehículo amaneció en el taller, porque no se consiguió el esparrago de los cauchos. La detención de las actividades normales por causa de la presencia de la dama que atractivamente ataviada se presenta en el sitio en la búsqueda de la solución práctica a la avería de su vehículo, con la consiguiente resequedad bucal dada la impactante belleza y firmeza de su porte en el trato. La preocupación del dueño del taller porque siendo día jueves, el suplidor de los repuestos no ha cumplido con la requisición solicitada y pagada por adelantado desde hace tres semanas. La mortificación del Administrador por el incumplimiento del pago de la tercera y última cuota de las respectivas reparaciones vehiculares y porque el viernes, ¡ay, el viernes! Se aparecen las madres de los muchachos de los que trabajan a buscar “el sobre de la semana” antes de que aquellos los conviertan en “tercios de piel oscura” o “catiras de blanca cabellera”.

Las vivencias de la mensualidad dentro de una entidad de ahorro y préstamo, como la de cualquier otro banco, son ricas en la generación de espontaneidades que, ya un productor del programa “Cámara Escondida” desearía captar con un juego de cámaras fijas; evidentemente, bastaría un día y con ello sería una muestra estadística de lo que ocurre durante todo el mes. Algunas de ellas son extraordinariamente hilarantes y otras de profundo abatimiento y es que por una parte, llega una oleada de jóvenes a los cuales hay que, léase bien: “hay que” y no, “se le debe”, entregar los requisitos para optar por un crédito vehicular en las condiciones publicitadas por el spot televisivo. Por otro lado, otra onda de menos jóvenes llega tras la búsqueda de las respectivas escrituras de las liberaciones hipotecarias, libradas por la institución tras el pago de la última cuota del crédito otorgado con garantía del inmueble de su propiedad y entre ambas oleadas, un hervidero de hombres y mujeres que beneficiados por las promesas gubernamentales de amor y paz, paz y vivienda, vivienda y “pensión justa” se presentan a diario a buscar su cuota parte de la tajada del presupuesto nacional.
Estas “oleadas”, ráfagas, raudales o como quiera denominarles, se convierten en verdaderos “tsunamis” para los empleados bancarios, unos más eficientes que otros; algunos más corteses que otros; varios mejor instruidos que el resto. Esos “mare magnum” son innumerables, constantes y, pobrecitos las y los empleados, no abastecen las solicitudes de atención. Días tras días, las peticiones encarpetadas vienen y carpetas marrones van; petitorias van y el canal de circulación se atasca; recursos llegan y se agotan y la vida continúa. Mientras tanto, aumentan los requisitos y entonces, lo que antes era dos días, se convierten en dos semanas y lo que era, dos semanas pasa a retardarse dos meses y así progresivamente.

La descripción de la administración anual de un país es harto complicada, sobre todo si es Venezuela. Comiéncese por el principio, son 31 y algo más, millones de historias diarias, incluyendo a los recién nacidos; son 335 organizaciones municipales y 24 entidades federales con sus respectivas organizaciones humanas. Un gobierno central con toda su parafernalia institucional y sus correlacionados. Coincidencialmente, a diario, todos comienzan a trabajar tarde y terminan temprano. Las ciudades capitales van convirtiéndose en almacenes de mendigos, de locuras ambulantes, de enfermos itinerantes, de alocadas pausas en aceras públicas ante miradas indiferentes, de interminables filas de gente útil buscando un mendrugo de pan a las puertas de un abasto, un supermercado. Las casas se transforman en inseguras cárceles cuyos propietarios envidian las seguridades de otros propietarios en recintos carcelarios. Los apartamentos y las demás propiedades inmobiliarias escasean y sus precios se encarecen. Los sistemas de transporte masivo están inconclusos y la demanda insatisfecha es exponencial. Reaparecen enfermedades y virus, desaparecen tratamientos médicos frecuentes y emergentes. Las ambulancias se paralizan por falta de repuestos y abusos de usuarios. En fin, en medio de tanta calamidad, allá en el barrio, acá en la urbanización los y las venezolanas le “echan pichón a la cosa”, manteniendo la cerviz alta y el orgullo impoluto, mientras el ácido corrosivo del verbo resentido carcome la lengüeta revolucionaria y los talegos del dinero mal habido viaja en jet sin saber que a la vuelta de la esquina les espera la pelona.


sábado, 5 de septiembre de 2015

LAS  PREDICCIONES  DE  NELSON  ROMERO  DÍAZ


Comprendo que le resulte chocante titular un artículo de opinión con el nombre del autor y para más señas que anuncie unas predicciones y no diga cuales tipos de ellas son. Más, como autor, le recomiendo que aquiete su intemperancia y se anime a leer un poco. Para algunos puede resultar de mucho interés; para otros, motivos de preocupaciones y no faltará quien diga que es parte de “la guerra económica que libra la Patria en contra del Imperialismo Yankee Y sus secuaces criollos, de la burguesía parásita, ¡yankee go home!

¿Por qué se llama Predicciones y no de otra manera; por ejemplo: pronósticos, vaticinios, augurios? En principio, es una cuestión de decisión y en segundo lugar, el resultado es una predicción. Atención: no soy Dios mucho menos sacerdote de la gentilidad, tampoco una deidad a quien pedirle respuesta y espero el respeto del prójimo, porque este trabajo como otros tantos, de mi persona y de otros opinadores, sirve de orientación para generar una vez más otra toma de decisiones.

“Nobleza obliga” es una expresión de cumplimiento y de respeto. Creo haber sido considerado al introducir respetuoso, animado y cálidamente el interruptor de su atención como si fuera el de la iluminación promoviendo esta paseo por las estadísticas.

¿Qué es lo que se predice? Las “probables” cotizaciones del marcador paritario de las monedas venezolana y estadounidense. Su predicción se fundamenta en la serie cronológica de sesenta y seis (66) datos colectados a partir del 1° de julio, lo cual comprende el Tercer Trimestre del Año y que culmina el 30 de septiembre. La predicción se extiende hasta el 9 de noviembre del corriente año, pero no los enlistaré en este artículo.

¿Cuáles son los elementos más significativos? No crea que le voy a vaciar todos los datos estadísticos, pero la fuente de ellos es primaria: es el portal de Dólar Today. Los datos son variables continuas porque se componen de una parte entera y una fraccionaria y por último, no es se agruparon por rangos. En fin, lo realizado es un proceso estadístico descriptivo.

Ahora bien, en el período 1° de julio a 4 de septiembre de 2015 se produjeron, tal como se anunció anteriormente, 66 importes resultantes de las transacciones  de la Unidad Monetaria estadounidense (USA $) en el intercambio de monedas en Cúcuta, Colombia. En las cantidades resultantes referenciales, se  incluye el porcentaje referido por el portal, igual al 11 %, por concepto del proceso transferidor; variable que es variable, valga la redundancia.
Amenizo este artículo predominante estadístico con un poco de historia numérica, para variar. Así, la más alta cotización fue: 727,63 Bs/USA $; ocurrida el 25 de agosto, la más baja alcanzó 484,41 bolívares por dólar, al inicio del período estudiado. El promedio de las 66 evaluaciones es 652,76. La más cercana a este promedio fue la del 24 de julio de este año e igual a 650,11 unidades.
La mediana de los datos es 679,78 unidades.
Entre las fechas extremas del lapso el incremento de las cotizaciones fue del 45,90 por ciento. La primera es la coincidente con el valor mínimo, es decir 484,41 y la más reciente, la de hoy, es de 706,93. ¿Puede interpretarse que la inflación es de 46 por ciento en 66 días? Si y no.
El monto más alto más veces repetido fue 691,40 Bs/USA $, 4 veces desde el 7 hasta el 10 de agosto. Otro repetido cuatro veces fue: 676,80 del 18 al 21 del mismo mes, pero note que el primero de los mencionados es el mayor de ambos.

Finalizando esta parte del tema planteado, se hace necesario advertir que los 66 días de referencia incluyendo sábados y domingos, jornadas en las cuales la cotización cambia poco o no modifica su estatus. De lunes a viernes la serie se compone de 48 datos. Lo más significativo de ellos, para los efectos de esta noticia, es incluido en la siguiente tabla de 6 columnas por 4 filas.

RENGLÓN
LUNES
MARTES
MIERCOLES
JUEVES
VIERNES
MÁXIMO
703,51
727,63
726,94
717,35
717,35
MÍNIMO
501,21
523,39
484,41
489,66
489,66
PROMEDIO
652,32
659,76
646,96
649,92
653,30

El espacio se acaba y el futuro no llega, tal como se avisó. Tome en cuenta que el cálculo de las predicciones se fundamenta en que el comportamiento experimentado en este período no tendrá extraordinarios cambios y por ser una serie cronológica, la ecuación para calcular los vaticinios no es lineal. Este Trimestre concluye el 30 de septiembre. Los probables resultados, a partir del lunes 7 de septiembre hasta el fin de mes, son

LUN
MAR
MIER
JUEV
VIER
SÁB
DOM
764,89
768,43
772,00
775,57
779,17
782,78
786,41
790,05
793,72
797,39
801,09
804,80
808,53
812,28
816,05
819,83
823,63
827,44
831,28
835,13
839,00
842,89
846,80
850,72

¿Cuál es la probabilidad de que las cantidades incluidas en “la tablita” no sean los probables resultados? El ciento por ciento. Las razones son: Primero, no soy quien controla el mercado. Segundo, la Paridad Monetaria se modifica porque el Banco de la República de Colombia, similar al Banco Central de Venezuela, es el ente que fija la paridad entre el Peso Colombiano y el Dólar Estadounidense. Tercero, es una función de la aceptación o no de la unidad monetaria venezolana. Cuarto, debe recordarse que en la generalidad de los casos, los fines de semana (sábado a lunes) la cotización se repite y en ese evento, la fórmula determinada con la técnica requerida no lo toma en cuenta.
Es posible tener otra aproximación numérica. Para ello habría que hacer los cálculos con la serie consecutiva de los días de la semana.

Finalmente, una vez concluido el Primer Trimestre hice unas proyecciones hasta el 5 de julio de 2015.  La cotización fue de 501,21 y el pronóstico fue de 431,95 Bs/USA $. La diferencia fue de un 14 por ciento, 13,82 % para ser precisos. Por cierto: el incremento en el Primer Trimestre entre el primero de los montos y el último fue de 44,52 por ciento.


05 de septiembre de 2015

miércoles, 12 de agosto de 2015

¿ALEJADO   DEL   MUNDANAL   RUIDO?   NO.   ¿CÓMO?

10 de agosto de 2015

Algún distinguido lector de mis trabajos de opinión habrá pensado en una probable lejanía del diario acontecer, pero no es así. Continúo haciéndolo dentro de un círculo; bautícesele con el calificativo de “estrecho”. Es una parte de los intelectuales de este país preocupados todos por su suerte, se entiende que es la del país y por ende, deducción o lógica elemental, por la nuestra.

Escribir con la regularidad de otros es un ejercicio para el cual no me he entrenado seriamente. Pienso que es la ausencia de tiempo real para la preparación de un documento. Por ejemplo: en mi cartera mental de proyectos no iniciados está el de la determinación del Pronóstico de la Unidad Monetaria Universal (UMU) basado en los datos recolectados durante el segundo trimestre y lo que va del tercero. Eso no se ha realizado y por tanto esperará un rato. Sin embargo, el deseo de presentarse y decir lo que haya de expresarse es, indetenible. En lo posible, lo haré breve y conciso, al estilo cuando publicaba en la sección “CARTAS” de El Nacional.

¿Cuál es, pues, el tema? Nada menos y nada más que las cuentas nuestras. La primera de esas operaciones matemáticas simples es la siguiente: para el 31 de julio de 2015, el Banco Central de Venezuela publica que la LIQUIDEZ MONETARIA fue 2.807.599.119 x 1 mil bolívares, es decir, 2.807 millardos 599,12 millones de bolívares. El Instituto Nacional de Estadística, a su vez, notifica que la población venezolana alcanza la cantidad de  30.620.404 habitantes. La simple relación LIQUIDEZ MONETARIA entre POBLACIÓN VENEZOLANA es 91.690,47 bolívares por habitante. Pregúntese hasta cuando le alcanza ese monto. Sume, reste, multiplique y divida para ver que le resulta.
La segunda de las cuentas es esta otra: para el 17 de julio de este año, las cifras del BANCO CENTRAL DE VENEZIELA con relación a la Liquidez Monetaria y a las Reservas Internacionales son definitivas. Se dice que la relación entre la Liquidez Monetaria y las Reservas Internacionales expresadas en Dólares es una cotización de ella, por lo tanto se puede utilizar como indicador de su tenor. Visto de esa manera, esa relación a esa fecha dio como cociente la cantidad de 173,21 bolívares por dólar estadounidense.

Otra relación de relativa significación sería la cuantía correspondiente a cada habitante si, las RESERVAS INTERNACIONALES se repartieran como quien reparte a los sobrinos lo que tiene en el bolsillo. Esa cantidad es: 510,48 UNIDADES MONETARIAS por cada habitante, es decir, 1,70 veces el cupo para compras por Internet.


Con esta demostración de cifras, pregunto: ¿Puede un individuo mayor de edad, venezolano, domiciliado en el territorio venezolano, seguir creyendo en las políticas de corte socialista de este equipo de gobierno? ¿Pueden los dirigentes políticos de los partidos de oposición seguir callando lo indebido? ¿Pueden los oficiales de carrera militar seguir tolerando que en nombre de Bolívar, si de Simón Antonio de la Santísima Trinidad Bolívar Palacios y Blanco, el Libertador, se siga mancillando el Honor de su Patria? ¿Pueden los venezolanos seguir tolerando que el “capricho discursivo” de Fidel Castro y sus acólitos diseñe nuestra vejez

lunes, 13 de julio de 2015

LO  INEVITABLE  DEL  DÍA  A  DÍA
12 de julio de 2015

Quienes nos inscribimos en la profesión de estudiantes, cuando éramos infantes, no nos imaginamos que algún día utilizaríamos los recursos empleados por los autores de los libros de texto para igualmente, redactar un artículo de opinión. Aún cuando lo moderno es ir al grano directamente, me permito la licencia de escribir extensamente, esta vez y no tanto, para la ejercitación mental del vocabulario guardado en el cerebro y con ello evitar, en lo posible, el arribo más pronto que tarde el alemán por todos conocidos.

Definamos el nombre del artículo. Lo inevitable, obviamente es lo que no se puede eludir y eso que es ineludible es la revisión, análisis, reflexión y comentarios acerca de la paridad monetaria libre; la misma publicada por el portal Dólar Today. El día a día, igualmente elemental, es “ayer, hoy y mañana”. Evidentemente, cientos de minutos por persona son ocupados por ese diario acontecer.
Hasta el momento no he dicho, en apariencia, nada, pero véase a continuación las siguientes referencias:
Primero. El primero de Enero fue día jueves y en ese entonces, la paridad USA $ vs Bolívares amaneció en 173,24 manteniéndose el viernes y elevándose el sábado hasta 176,10.
Segundo. En la semana del 5 de enero al lunes 12, es decir ocho días, el promedio aritmético de ellos fue 181,05 y el incremento “entre lunes” fue de 6,24 unidades porcentuales.
Tercero. La secuencia estadística registrada por mí durante este año establece que hoy, 13 de julio, se inicia la semana 29 del año. La máxima paridad alcanzada es 611,88 unidades monetarias venezolanas por la estadounidense. En términos de paga mínima horaria en el territorio americano esa cotización representa SETENTA Y SEIS HORAS Y MEDIA DE LABOR.
Cuarto. Ese número de horas que un norteamericano pagaría por su moneda en territorio venezolano, son NUEVE DÍAS y MEDIO de trabajo a razón de 8 diarias. En Venezuela, la hora hombre de un trabajador es incalculable, porque no se contrata así.
Quinto. El mayor porcentaje de incremento inter semanal de 8 días del promedio diario de la cotización paritaria se produjo en la semana 10, en la que el aumento con respecto a la semana 9 fue de 20,82 por ciento. La media de la semana nona fue de 206,29 y la de la décima 249,24 bolívares por dólar.
Sexto. En el lapso de las cinco primeras semanas de este año, la escalada de la cotización se produjo los días sábados o domingos. En la sexta, ocurrió un jueves.
Séptimo. El cambio de rango de cotización fue el siguiente: los 200 Bs/USA $, un jueves; los 300, otro jueves; los 400 bolívares por dólar, el 23 de mayo del corriente año; los 500, fue ahora, reciente, un sábado y el de los 600, el pasado viernes 10 de julio cuando alcanzó 611,88 Bs.

Finalizo. Hay deducciones de todo cuanto acontece. Una de ellas es, lo indetenible de la actividad comercial y de las transacciones monetarias. Solo a “un tipo de idiota latinoamericano” se le ocurrió pensar que el progreso de su patria se alcanza trabajando menos horas a la semana que el resto de los ciudadanos mundiales, salvo que queramos vivir como mendigos. El bachaqueo de mercancía luce como una forma rústica de paliar el desempleo, mientras el gobierno arremete contra la empresa privada. ¡Bonita forma de amar a los venezolanos la propuesta de ese idiota!


martes, 7 de julio de 2015

A  PROPÓSITO  DEL  5  DE  JULIO

5 de julio de 2015

En los tiempos recientes; hablo de semanas hasta dos meses atrás, me he interrogado acerca de estas cuestiones: ¿Qué es ser venezolano? ¿Qué es ser chavista o pro gobierno? ¿Qué quiere decir “anti gobierno” si ello es sinónimo de oposición? ¿Por qué algunos venezolanos que disfrutan de privilegios como funcionarios gubernamentales de primera línea insultan al resto de sus prójimos?

El país vive una contradicción. Por una parte, el equipo administrador hace lo imposible por completar la obra maestra de su supremo ídolo: Fidel Castro, cuyo rostro sirvió de modelo para cambiarle la cara a Bolívar, y por la otra, una inmensa mayoría tratando, en la medida de sus posibilidades, impedir la oficialización de la hora de ir al sanitario al igual que la imposición de otras tantas cosas de vida.
Uno, y como yo muchos otros, se formó en un ambiente socio educativo, económico político y confesional muy, pero muy distinto al actual. Tanto es así, que aquellos tiempos hoy parecen unas estampas fotográficas sepias.
Uno, y como yo demasiada gente, reunió propósitos y objetivos personales, colectivos y también altruistas y llenos de solidaridad sin olvidar que para exigir respeto hay que respetarse primero a sí mismo. Lo observado hoy “por estas calles” es una mala copia de la mendicación, que para quien la ejerció vergonzosamente, es decir dignamente, es una forma de vida llena de penas. A otros le ha producido unos incalculables dividendos. No solo económicos, sino político partidistas por igual. Indaguen y métanlos en sus sacos. Ayer, hoy, y..... No sabemos si siempre será así.

Y luego de diluirme en comparaciones, retomo el hilo. ¿Qué es ser venezolano? ¿Puede asegurarse que es quien se viste de vino tinto cuando va al balompié sabiendo que a los cariocas no se les gana? ¿Acaso es el espectador que asumiendo la conducta de la masa, canta bobaliconamente la letra de “morir en Venezuela”? ¿Es por carambola el criollo que toma la calle para maldecir al gobierno estadounidense o, cualquier otro extranjero, que ose “tocar con el pétalo de una rosa” a un venezolano?
Pero hay más interrogantes. ¿Es venezolano quien “trampea” con las placas del vehículo para no respetar el día de parada? ¿Es quien se aprovecha de las débiles condiciones orgánicas de una mujer para, bajo engaño, superarla en la fila de quienes van a “bachaquear”? ¿Es el trabajador de una empresa que prefiere verla cerrada que produciendo? ¿Es el ingeniero que le quita cemento a la dosificación del concreto para no sé qué cosa? ¿Es acaso un militar que por “adoración a un ídolo de barro” es capaz de llevar a sus paisanos a la ruina?
Cuantas preguntas más se pueden plantear ante el panorama actual. La respuesta: ¡Infinitas! Y es así porque los humanos somos, mentalmente, como la plastilina, y los venezolanos, más aún.

A nadie se le objeta ser adeco, copeyano, masista, pesuvista, comunista, urredeco, efedepistas, cruzadistas, efenedistas, mepecos o como se agrupan ahora, los chavistas y maduristas en el polo patriótico de ellos y, el resto. Y ese resto son los venezolanos no adheridos al proyecto político de Chávez, quien valido de la alta votación recibida, cambio “la leche” a los venezolanos. Estos como “mansas palomas” se dejaron conducir a las estacionarias naves que los llevarían a dar un paseo de instalación en “el mar de la felicidad cubano”, aún cuando estuvieran avisados y advertidos. Recuerde Vargas, año 1999.

A nadie se le objeta que sea pro gobierno, pero si su creencia a “pies juntillas” de que el Estado lo puede todo. Uno, y como yo bastantes venezolanos más, saben que el monopolio estatal es inservible. Durante la administración Pérez Jiménez, el Estado lo fue prácticamente todo. Claro, había una razón éramos muy pocos. El cuadro único del 5 y 6 con las pruebas corridas en el Hipódromo de “El Paraíso” no superaba 1,5 millones de bolívares de la vieja denominación, algo más de 447 mil dólares. Publicitariamente, al mismo millón le quitaron los tres últimos ceros por orden de Chávez cuando la verdadera razón fue disminuir su patrimonio en mil veces y se habló de bolívares fuertes. Ocultar la verdad para convertir aquel millón y medio en 1.500 bolívares. ¡Otra obra maestra del engaño!

Ahora bien, no es criticable que sea pro oposición. Lo criticable es la creencia que el solo cambio de figuras de una corriente para la otra, va a colocar el país en niveles equivalentes a los anteriores al 2005. No, mi respetado lector, para recuperar a la Nación debe estar de acuerdo mucha gente cuyos intereses grupales, gremiales, sociales, políticos son similares, pero no los mismos.
Hay mucha rabia acumulada, mucha frustración inoculada. Pero al igual que los anteriores, creer que el Estado lo puede todo, aún con bemoles, es difícil de validar. ¡Los venezolanos somos anti pulquérrimos administradores!

El poder es una cosa seria. Teniendo esa característica y conociéndolo, el individuo se puede preparar para afrontar sus veleidades porque de lo contrario sucumbe. A tres años del grado universitario, me desempeñé como director de un ministerio en el estado Cojedes por varias semanas, entre paréntesis: no voy a decir que fueron meses porque sería mentira. Si no hubiese internalizado que aquella situación era temporal, que los privilegios de un director regional de un ministerio abre muchas puertas cerradas, que después de entrar en el sub mundo del poder y de sus frivolidades se pierde la noción terrenal; si no hubiera pisado tierra con anticipación, quizás que desafortunada trayectoria posterior hubiese tenido. Lo narro como una experiencia personal.
El poder es así. Genera adicción y por ello los débiles de carácter son víctimas. Son víctimas de fortalezas intelectuales que detectan esos potenciales quiebres e inmediatamente masajean el ego con mensajes subliminales elevadores de la cantidad de burbujas de champan en la cabeza, para sacarle el máximo provecho.

Hay un libro: “Las 48 leyes del Poder” que lo dice todo acerca de este. En su contraportada se lee: “Hay quienes juegan con el poder y lo pierden todo por un error fatídico.........hay quienes se mueven de manera adecuada y consiguen hacerse con el poder con una destreza casi sobrehumana.........las 48 leyes del poder son eternas y definitivas. Amoral, astuto, despiadado e instructivo LAS 48 LEYES DEL PODER resume la esencia de tres mil años de historia del poder”.

La única verdad es que el Poder no es eterno, solo DIOS lo es, y al día siguiente de disfrutar de sus privilegios, los humanos son unos mortales cualesquiera y están sujetos al escrutinio sin perdón.



sábado, 6 de junio de 2015

BASTA  DE  DIAGNÓSTICOS.   SEGUNDA  PARTE

Nelson Romero Díaz
04 de junio de 2015

En días pasados redacté la primera parte de este título: “BASTA DE DIAGNÓSTICO” del cual tuve retroalimentación y observaciones pertinentes, como la de la profesora Luisa Pernalete y de mi hermano, Asdrúbal.

Hoy es jueves y el tema generador de este título está pendiente por dos “propuestas por hacer” referidas a lo asistencial y a lo ciudadano. Ni soy especialista en salud pública ni tampoco en el tema de la socialización, pero hay eventos y actitudes que requieren ser atendidos. Opino como persona.

En el tema asistencial. El país no, el Estado sí. La organización administrativa del Estado sí es responsable del estado sanitario del país. Pero también lo son los pobladores, el término ciudadano parece ser gigantesco, por no tener cuidado con el tema de la basura, de la construcción de viviendas en las márgenes de los cursos de aguas negras y de la no disposición clasificada de los desperdicios hogareños, industriales, comerciales. La irresponsabilidad del poblador es acompañada de la indiferencia estatal porque bien poco le importa al cabeza gubernamental que la población permanezca en hospitales, ambulatorios, clínicas, hospitales privados, centros asistenciales de atención primaria esperando por el diagnóstico del mal que le aqueja.
Los funcionarios de este régimen hablan “pendejadas”, y acepten mis disculpas los lectores por el vocablo, del sistema asistencial desarrollado por el régimen ideológico anterior, vale decir, desde López Contreras hasta  Caldera II. Ciertamente tuvo sus fallas, pero nunca dejo de construir hospitales, de dotarlos, de sostener la asistencia social. De hecho, se podría decir que ella estaba distribuida en dos: rural y urbana. ¡Ah! Nunca faltaron las medicinas y tampoco se suministraban medicamentos vencidos como sucede actualmente. Así mismo, a nadie se le exigía récipe para comprar fármacos para, por ejemplo, la diabetes o, tampoco se limitaba la cantidad de artículos. Ahora, “esta discapacidad ESTATAL es la norma”: ¡Que ca...!

Hoy, con esa enorme capacidad de engañar, de mentir, de crear ilusiones y esperanzas, la población está peor atendida que antes: creció en número y el Estado con todo su poder económico no construyó un hospital nuevo en ninguna capital de la provincia; edificó “Módulos Barrio Adentro” y “CDI”, para justificar la venida de cualquier cantidad de “médicos cubanos”, sin ofenderlos, porque Fidel Castro le metió en la sesera a Hugo Chávez Frías que los médicos egresados de las universidades venezolanos no tenían sensibilidad social y hasta llegó a poner en duda los conocimientos adquiridos. ¡Basta de hablar del muerto!

En una nueva etapa del desarrollo asistencial del Estado hacia la población se debería: construir un macro centro hospitalario en cada segunda ciudad de importancia de cada entidad federal de la provincia. Esto es una enorme organización que atienda todas y cada una de las especialidades médicas existentes y por existir; provista de la personalidad jurídica y administrativa para proveerse de los recursos dinerarios en forma progresiva en una gestión tripartita compartida, una de cuyas partes es una sociedad civil integrada por médicos, enfermeras, personal administrativo, obreros. Para simplificar esta proposición, la idea es la fundación de una “ciudad médica”, eso sí, el lapso de puesta en marcha no debe sobrepasar los cinco años desde el inicio de la colocación del “primer bloque conmemorativo” hasta la apertura con la “bendición cristiana” de las instalaciones, incluyendo el personal que va a trabajar y residir allí.
Los jubilados y pensionados deberán recibir sus emolumentos y el aviso de retirarlos de la institución bancaria cualquier día del mes. Da pena ver a cantidad de personas con dificultades para mantenerse en pié haciendo filas en las puertas de los bancos.
Debe ser meta del Estado que no haya ningún motivo banal para que se desaten epidemias de enfermedades y por ende, mas “reposos médicos”. Al “reposero profesional”, el sistemático, el que “reposa” hasta por un “hongo en el meñique del pie izquierdo” hay que procesarlo administrativamente. Y que se entienda apropiadamente este término: “procesarlo administrativamente”.


El enfoque pendiente es el tema “CIUDADANÍA”. Es extenso, amplio, y no es reductible a dos páginas o dos cuartillas. Además, el espacio se terminó. Van 677 palabras con estas.